Los vehículos con caja de cambios automática están ganando cada vez más terreno en el sector del automóvil gracias a su mejorada tecnología y eficiencia. No obstante, gran parte de los conductores españoles continúan prefiriendo la conducción manual, puesto que consideran que la buena conducción reside en el control del vehículo por parte del usuario.
A continuación, para aquellos conductores que todavía dudan entre el cambio manual o automático a la hora de comprar un coche, expondremos las principales diferencias existentes entre ambos cambios, con el objetivo de aclarar sus ventajas e inconvenientes y que los usuarios puedan escoger la opción más acorde a sus necesidades.
Cambio automático
Una de las principales diferencias entre el cambio manual y el automático es su precio. Obviamente, el precio de un coche con transmisión automática es bastante más caro que un vehículo con cambio manual, ya sea un coche de gama media o de gama superior, donde la diferencia es todavía más grande.
Actualmente, todos los avances y las mejoras en las transmisiones automáticas han permitido que ambos cambios se sitúen a un mismo nivel de eficiencia.
Las fichas técnicas de los coches suelen homologar el mismo consumo con ambos cambios, e incluso muchas veces éste es menor si está asociado a un cambio automático.
Cambio manual
En cuanto al mantenimiento, los vehículos con cambio automático necesitan un mantenimiento bastante más exhaustivo y por lo tanto, más caro que los coches con transmisión manual. Además, cabe destacar que las cajas de cambio manuales duran bastante más y su reparación es más barata.
Por otro lado, los cambios automáticos ganan en cuanto a seguridad, puesto que permiten que el conductor tenga las manos en todo momento sobre el volante y no tenga que estar pendiente de los pedales; esto se traduce a una mayor concentración y atención por parte del usuario hacia la carretera. No obstante, como inconveniente, la caja de cambios automática puede resultar más monótona, sobre todo en viajes largos, lo que puede provocar ciertos despistes en la carretera.
Por último, respecto al coste por uso, los vehículos con cambio manual pueden emplear el freno motor, de forma que los automáticos sufren un mayor desgaste de frenos. Sin embargo, el embrague de los coches manuales puede ser el origen de grandes averías en la caja de cambios o en el motor, si no se utiliza de forma correcta.