¿Hay una sensación peor que el calor de julio y agosto a las cuatro de la tarde con el sol? Sentarte dentro de un coche con temperaturas abrasadoras supera con creces esa sensación de agobio que nos produce el calor. Pero hay algunos trucos que pueden hacer más llevadero este ritual y, sobre todo, sufrir menos las consecuencias de las altas temperaturas.
Lo más simple suele ser lo más efectivo. Sombras de gran tamaño a la hora de aparcar, de esta manera rebajaremos ligeramente el calor en el interior del coche y entrar en él no será agradable, pero sí más llevadero. En el mismo sentido, utiliza siempre un parasol. De esta manera puedes rebajar la temperatura interior del coche hasta en 10 grados y los rayos del sol no incidirán directamente sobre el salpicadero y sus plásticos, por lo que aumentarás su vida útil y evitarás que pierdan color con el paso del tiempo. Por su puesto, el volante o la palanca de cambios no quemarán nuestras manos.
Las ventanillas tintadas siempre es una buena opción. Igualmente, si no te lo pudiste permitir en su día, no está demás en que vayas a un sitio especializado e inviertas en este sistema. La temperatura en el interior se reducirá y los rayos del sol no incidirán con tanta fuerza sobre las tapicerías y los cinturones, otros clásicos que abrasan nuestras manos.
Estos pequeños trucos los podemos aplicar en nuestro día a día y están al alcance de nuestra mano, pero el mantenimiento es muy importante para contar con un coche fresco.
Si los sistemas de refrigeración se encuentran en un buen estado, el climatizador o el aire acondicionado enfriará antes y con mejor calidad de aire el habitáculo, pero también será menor el esfuerzo que tenga que realizar la mecánica de nuestro vehículo para conseguir una temperatura agradable en el interior.
Y si estás pensando en viajar o salir de vacaciones en los próximos días o semanas, cuida tu coche, pero también cuida de ti mismo. Antes de comenzar la marcha, baja las ventanillas del coche y airea el interior en las horas centrales del día, procura evitar viajar en las horas más calurosas, lleva siempre botellas de agua en el interior y planea el viaje, con paradas cada dos horas o 200 kilómetros.